Reloj de la marca WESTCLOX, en níquel y cromo con caja lepine.

 

Catalogación Referencia: MIARB Nº: 743 JDBC.

 

 

Siglo XX, circa 1940.

 

Reloj de bolsillo de la marca WESTCLOX, SCOTTY de los EEUU; Shock resistant, made in USA, con caja lepine lisa en níquel y cromo.

La esfera es en esmalte negro sobre cobre convexo con numeración arábiga gruesa luminiscente a radio. Dispone de segundero a las VI. Las agujas fueron barnizadas a radio luminiscente, facilitando la visión de la hora en la oscuridad.

En la pletina, realizada en metal plateado, se ha grabado “Made in USA W”.

 

WESTCLOX se estableció originalmente en 1884 como “United Clock Company” of Peru, Illinois, basada en una idea nueva e innovadora de Charles Stahlberg. La innovación de Stahlberg fue patentada en septiembre de 1885 y su idea resultó ser exitosa. Comenzó con una pequeña fábrica en la parte trasera de una tienda por departamentos produciendo solo un reloj por día. Gradualmente aumentó la producción a 25 relojes por día con su personal de sólo ocho personas y luego trasladó la empresa a su propio edificio.

En 1908, la compañía propuso cambiar el nombre a “Western Clock Company”, que luego fue acordado por los accionistas en 1912.

En 1908, la compañía creó un reloj con un diseño de «timbre» y se le concedió una patente para el movimiento del despertador «Big Ben». Esto dio lugar al primer reloj “Big Ben” introducido en el mercado en 1910. El gran éxito del “Big Ben” llevó a la Compañía a desarrollar una versión más pequeña conocida como “Baby Ben”. En 1920, el Big Ben se convirtió en el primer despertador anunciado a nivel nacional.

En los últimos años, WESTCLOX introdujo un reloj despertador portátil para viajes, destinado a ser asequible para cualquier persona que trabajara.

En 1938, durante la Segunda Guerra Mundial, Westclox cesó toda la producción de relojes para venta doméstica en dedicación al esfuerzo de guerra. La compañía centró la producción en instrumentos de aviación para el Ejército y la Armada de los Estados Unidos.

Después de apoyar los esfuerzos de guerra de la Segunda Guerra Mundial, WESTCLOX continuó diseñando y produciendo otro «primero en su tipo». En 1959 introdujeron su alarma «Drowse», que funcionaba con electricidad e integró lo que ahora se conoce comúnmente como la función «Snooze».

En 1961, la compañía estableció la primera línea de montaje automatizada que incrementó en gran medida la producción. Con el paso del tiempo, la popularidad de WESTCLOX continuó extendiéndose por todo Estados Unidos y en 1972, introdujo los movimientos de cuarzo en su línea de productos. La introducción de los movimientos del reloj de cuarzo permitió que los diseños evolucionaran para ser más elegantes.

Hoy en día, WESTCLOX es una marca líder con una amplia variedad de relojes de alarma y de pared que se pueden comprar en las principales tiendas minoristas de los Estados Unidos, Canadá y el resto del mundo.

WESTCLOX SCOTLAND era una fábrica filial del fabricante de relojes WESTCLOX, ubicada en el polígono industrial Vale of Leven en Dumbarton, Escocia.

(Fuente: https://en.wikipedia.org/wiki/Westclox y https://clockhistory.com/westclox)

 

Elemento técnico de escape situado en la maquinaria. Dicha pieza, como su nombre indica, recuerda a un áncora y lo que la caracteriza es que recibe la fuerza para el impulso sobre sus dos extremos y la transmite al volante por su tenedor, que a continuación transmite a una pieza solidaria con el eje del volante durante unos instantes, mientras que la velocidad del volante es máxima dejándole libre durante su oscilación, de ahí su nombre de escape libre.

  

Los primeros relojes que funcionaron en los Estados Unidos tuvieron sus antecedentes en el Reino Unido. A su vez, relojeros emigrantes de origen inglés comenzaron a producir sus relojes al otro lado del Atlántico, aportando nuevas creaciones y patentes.

Más tarde, también los relojeros emigrantes de Alemania y Centroeuropa asentados allí se introdujeron en el sector de la relojería, creando e importando piezas de Europa. Pero en los nuevos estados era difícil que pudiera perpetuarse cualquier tipo de taller de dimensión personal o familiar. El país de los EEUU vivió con intensidad dinámica el mismo proceso que en la vieja Europa había consumido siglos: si el reloj, en 1780, era necesario, no lo sería solo ya para la clase dominante o pudiente, sino para una capa social de mayor espectro, por lo que en seguida se planteó la necesidad de organizar de alguna forma la producción industrial en serie. Para esto, contaban con la capacidad de iniciativa, el ingenio, la organización industrial, etc., capaz de atender a una expectativa de gran consumo sin parangón en el mundo.

La historia de los primeros fabricantes norteamericanos de relojes, ahora puesta de manifiesto, es apasionante como ninguna otra. Eli Terry empezó copiando los relojes de la Selva Negra, en madera, y de Edward Howard, y sus muchos seguidores.

Ellos fueron los primeros en producir los relojes en serie. Baste decir que los suizos acudieron allí para aprender y aplicar su tecnología de la producción en serie, a fin de adaptarse a los nuevos tiempos.

(texto extraído del libro “Relojes” del maestro relojero Luís Montañés; colección Diccionarios Antiqvaria)