Pitillera art-décó con encendedor y reloj para llevar en el bolsillo, de la marca norteamericana EVANS.

 

Catalogación Referencia: MIARB Nº: 681 JDBC.

 

 

Siglo XX, circa 1930

 

Pitillera art-décó extraplana para bolsillo con caja en latón dorado y decorada a profusas grabaciones lineales longitudinales. En su parte superior  dispone de encendedor con gran depósito  para la gasolina y debajo de este un reloj cuadrado con numeración arábiga estilo art-décó.

La pitillera es tan plana que permite guardar los cigarrillos ordenados y preparados elegantemente para su utilización. Estos aparatos se popularizaron cuando los cigarrillos se empezaron a comercializar.

El Art-déco es un movimiento de diseño popular que se desarrolla a partir de 1920 hasta 1939, influyendo en las artes decorativas, entre otras la de la relojería, como es en este caso. Es una amalgama de muchos estilos y movimientos distintos de principios del siglo XX y, a diferencia del “art nouveau”, se inspira en las Primeras Vanguardias: constructivismo, cubismo, futurismo, del propio art nouveau, del que evoluciona, y también del estilo racionalista de la escuela Bauhaus.

 

Elemento técnico de escape situado en la maquinaria. Dicha pieza, como su nombre indica, recuerda a un áncora y lo que la caracteriza es que recibe la fuerza para el impulso sobre sus dos extremos y la transmite al volante por su tenedor, que a continuación transmite a una pieza solidaria con el eje del volante durante unos instantes, mientras que la velocidad del volante es máxima dejándole libre durante su oscilación, de ahí su nombre de escape libre.

  

Los primeros relojes que funcionaron en los Estados Unidos tuvieron sus antecedentes en el Reino Unido. A su vez, relojeros emigrantes de origen inglés comenzaron a producir sus relojes al otro lado del Atlántico, aportando nuevas creaciones y patentes.

Más tarde, también los relojeros emigrantes de Alemania y Centroeuropa asentados allí se introdujeron en el sector de la relojería, creando e importando piezas de Europa. Pero en los nuevos estados era difícil que pudiera perpetuarse cualquier tipo de taller de dimensión personal o familiar. El país de los EEUU vivió con intensidad dinámica el mismo proceso que en la vieja Europa había consumido siglos: si el reloj, en 1780, era necesario, no lo sería solo ya para la clase dominante o pudiente, sino para una capa social de mayor espectro, por lo que en seguida se planteó la necesidad de organizar de alguna forma la producción industrial en serie. Para esto, contaban con la capacidad de iniciativa, el ingenio, la organización industrial, etc., capaz de atender a una expectativa de gran consumo sin parangón en el mundo.